Volver a empezar

Las ventanas cubiertas de moho invernal 
se cerraron para siempre,
llevándose consigo los recuerdos temerosos 
cubiertos de palabras defectuosas
que se olvidarán de una vez por todas. 

El cuarto dejó de oler a mentiras
y a todas las porquerías que se prometían, 
poco a poco tomaba su curso la razón 
y dejaba a un lado el corazón.

Las cortinas del alma
se zurcían poco a poco 
dejando de doler por completo 
y formar así una nueva constelación 
para poderla ver con emoción.

Ahora se anhelan nuevas caricias
cargadas de malicia,

besos llenos de felicidad y armonia 
para continuar una nueva partida 

abrazos que te hagan llorar de felicidad
para que te sientas segura para comenzar y terminar 

y sobre todo

Amor,
para combatir a todos sin temor.