Primer amor

Me desperté sobresaltada por las caricias del frío,
¿dónde estás que no te olvido? 
miré a mi lado, yacía inerte tu calor, desvanecido por el dolor 
implorando tu regreso...

ahí supe, que no era nuestro tiempo.

No sé si merecíamos más, 
no sé si tuvimos miedo al anochecer 
o nuestros simples complejos
nos llevaron a perecer. 

Nuestro amor se fundó sobre pétalos de miel 
formando tinta auténtica de pasión,
recorriendo al mundo de la mano 
pensando que nadie podía arrebatárnoslo. 

Podrán pasar los años 
y yo, te seguiré soñando
recordando que fuimos felices 
en nuestro mundo lleno de matices. 

Deseo que encuentres un lugar 
donde no temas al navegar, 
donde fluyas, y que al despegar...

te amen sin parar.